Inteligencia Colectiva para fortalecer la Democracia
Por Augusto Tomás Val, Practicante de Innovación Pública 360°.
En el marco de la celebración del Día Internacional de la Democracia 2022 y una nueva edición de #DemocraciaViva, se realizó un nuevo ciclo de diálogos de “Al Encuentro con Minerva”, organizado por el proyecto de Innovación Pública 360° de Asuntos del Sur. En esta ocasión, tuvimos la oportunidad de conversar con Amalio Rey, experto en Gestión de la Innovación e Inteligencia Colectiva, sobre la importancia que tiene ésta última y su puesta en práctica para el desarrollo y fortalecimiento de nuestras democracias.
Según Amalio, la Inteligencia Colectiva (IC) tiene lugar en el agrupamiento de personas que buscan realizar una serie de tareas de forma conjunta con la finalidad de resolver retos comunes y tomar decisiones colectivas a gran escala. Asimismo, entiende que en esa unión de individuos se desarrolla un grado de inteligencia que podemos situar dentro de una escala mayor. Por este motivo, entiende que la Inteligencia debe comprenderse como un continuo, contrariamente al enfoque binario que considera que la IC sólo será cuando la inteligencia del grupo sea la suma de las partes.
Además, sostiene que ese trabajo colectivo, que tiene por objetivo sortear dificultades compartidas y en el cual se manifiesta la Inteligencia Colectiva, se debe producir mediante mecanismos efectivos, afectivos y legítimos.
De este modo, propone una serie de puntos que para él darían espacio a un mayor desarrollo de la IC, y por ende elevarían la confianza de la ciudadanía en los sistemas democráticos.
En primer lugar, es de vital importancia reforzar la cultura de la interdependencia, entendiendo que la IC no se generará si actuamos en soledad. Por eso mismo, son sumamente relevantes la pedagogía de los procesos, que estimula a la ciudadanía a participar de procesos socialmente enriquecidos, dejando de lado la perspectiva resultadista exacerbada, y la cultura del prototipado, que favorece al aumento de la tolerancia al error.
Otro punto considerable que nos menciona Amalio es el paternalismo arrogante propio de las izquierdas: no existe una superioridad moral o racional. No es práctico pensar que la gente no sabe lo que es mejor para ella. De esta forma, afirma que es necesaria una postura activa de la gente para la formación de la IC. Esta contribución por parte de los individuos se apoyará en la información recogida en sus experiencias de la vida cotidiana (“expertos en experiencia”) y en un rediseño informacional que reduzca los costos de informarse.
Sin embargo, una mayor cooperación entre todxs debe ser acompañada por la inclusión de los sectores más afectados y por una diversidad de talentos, talantes y destrezas. Por este motivo, Amalio considera que el talento está distribuido en toda la ciudadanía y que sólo un mecanismo aleatorio logrará mostrar fielmente el universo soberano que participa del proceso. Incluso, para un mayor alcance deberán tenerse en cuenta la utilización de plataformas participativas, tales como crowdlaw o crowdsourcing de leyes, que permitan una deliberación a gran escala. También, propone nuevos diseños institucionales que posibiliten una mejor calidad conversacional, cuidando de la legitimidad y robusteciendo la democracia deliberativa.
Por último, el invitado afirma que para tener un sistema democrático mucho más saludable es fundamental resignar ese deseo intenso de conseguir los objetivos planteados y optar por un modelo de supermayorías, en donde la deliberación y el consenso sean quienes direccionen los procesos de decisión, favoreciendo la inclusión de mucho más personas.
Luego de ello, Amalio concluye que las personas no es que estén desinteresadas y apáticas en participar, sino que aquello es efecto de los fallos de participación que hoy tenemos.
¿Qué es lo que enfatizamos desde IP360? Tenemos la convicción de que es sumamente necesario el involucramiento de la ciudadanía en la resolución de los problemas públicos que enfrentan los distintos gobiernos a través de la puesta en práctica de la Inteligencia Colectiva, compartiendo información y experiencia que resultará indispensable para el fortalecimiento de nuestras democracias.